La revista Psychological and Personality Science revela que cuando nuestra autoestima se ve amenazada, tenemos la tendencia a comprar más y a echar mano de nuestras tarjetas de crédito. Cuando nuestro ego es golpeado por que hacemos algo mal, o alguien nos hace ver que le hemos decepcionado, recurrimos al dinero plástico para autocomplacernos y comprar cosas que nos hagan sentir mejor, con preferencia productos caros o lujosos.
Pero entonces, ¿adquirir un producto lujoso repara nuestra autoestima? Dicen los científicos precursores del estudio que sí. Y no sólo eso, también nos reafirma psicológicamente. Aunque advierten que hay que ser cautelosos a la hora de usar (y abusar) de las tarjetas de crédito, porque luego, lo que nos hace bien a corto plazo, puede, a la postre, acarrearnos problemas. (Léase: las cuotas de pago).
Así que ya nos confirman lo que sospechábamos todos: que comprar hace bien al ego. Pues nada, habrá que ir al mall a darse una auto-terapia.
Fuente: http://www.muyinteresante.es
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